Vilagarcía

La batea tenía el firme propósito de no postear más sobre los acuerdos postelectorales pero es que hay cada elemento en la política municipal que no queda otro remedio.

Aquí en frente, en Vilagarcía, una de las ciudades más sucias de toda Galicia, que no se ofenda el alcalde y salga otra vez con los fríos números de que la ratio contenedores / vecinos es superior a la media, que se de una vuelta por el pueblo y que lo vea. No es por exagerar pero la mierda de las aceras desaparece por erosión, nunca por limpieza.

Pues a lo que vamos, resulta que tras el batacazo que se metieron en las municipales con ese candidato impuesto por Santiago, un antiguo representante de los cuerpos de represión y tras aceptar el apoyo de los incautos y un tanto conservadores representantes locales del BNG en la sesión de investidura, resulta que deciden no llegar a un acuerdo e intentar gobernar en minoría como ya había manifestado en plena campaña. Quizás deberían recordar que el apoyo de los representantes de la excisión por la derecha del PP no les será suficiente como si lo fue durante los cuatro años anteriores.

Además y no contento con la división interna latente va y decide presentarse en la rueda de prensa que ofrece un miembro de la candidatura y en la que explica que renuncia al acta de concejal por motivos personales, etc, en la cual el señor alcalde le dice: "aquí estoy para apoyarte, bla, bla" y recibe como respuesta un no rotundo. Todos sabemos que llevar una L no es fácil pero este señor se empeña en hacer el ridículo con toda la prensa delante.

Pero vamos que esto no sólo sucede en los pueblos pequeños, en los grandes como en Lugo también ocurre algo parecido y Orozco ya escenifica acuerdos con el PP para dejar al BNG aislado en la corporación. ¿A esto se refería los grandes líderes autonómicos con eso de escuchar el cambio pedido por la ciudadanía?.

Y que decir de los comentarios de la iglesia sobre la colaboración con el mal de aquellos centros que impartan Educación para la Ciudadanía ya que supone educar en la "moral laica", y que se supone que es España a pesar de los acuerdos firmados incluso por el PSOE (ya hemos comentado aquí más de una vez que la S y la O le vienen grandes).